El envío DDP de China a España es una opción popular para las empresas que buscan simplificar el comercio internacional. El vendedor se hace cargo de todos los costes, incluidos los de envío, derechos de aduana e IVA. Los compradores reciben sus mercancías sin preocuparse del despacho de aduanas ni de tasas inesperadas, lo que lo convierte en una opción atractiva para los clientes españoles.
El transporte aéreo es la opción más rápida y suele tardar entre 7 y 12 días. Para envíos más grandes o entregas menos urgentes, el transporte marítimo es más asequible pero más lento, con tiempos de tránsito de 30 a 40 días. La elección depende del tamaño del envío y de los plazos de entrega.
España sigue una estricta normativa aduanera de la UE. Es fundamental disponer de documentación precisa, como facturas comerciales, listas de empaquetado y descripciones detalladas de los productos. Algunos artículos, como los alimentos, los productos electrónicos y los textiles, pueden requerir certificaciones o etiquetados específicos. Garantizar el cumplimiento es clave para evitar retrasos o sanciones.
Los compradores españoles aprecian la comodidad del envío DDP. Conocer el coste total por adelantado aumenta la confianza y facilita el proceso de compra. Esto es especialmente beneficioso para las empresas de comercio electrónico que buscan expandirse en España.
Los vendedores deben estar al día de las normas de importación de la UE, ya que España se adhiere a ellas. Asociarse con un transitario de confianza puede ayudar a garantizar una entrega sin problemas y el cumplimiento de todos los requisitos aduaneros.